Te tengo tan cerca y a la vez tan lejos,
Que parece una ironía de la vida,
Que juega con nosotros como fichas de parqués,
Que nos mueve a su antojo,
Nos ata y nos libera según sea su capricho…
¡Que ironías tiene el destino!,
Cuando te tenía cerca no te valoraba,
Y ahora que estás lejos, mi corazón te extraña…
Tan cerca y tan lejos de mis labios,
Tan cerca que puedo mirarte,
Pero a la vez, tan lejos que no alcanzo a tocarte…
Y me conformo con amarte así, de lejos,
Porque peor que no tenerte,
Sería algún día olvidarte…
“Aquel que vive en nuestra mente, está cerca aunque realmente esté lejos, pero aquel que no está en nuestro corazón, está lejos aunque en la realidad esté cerca de nosotros.” Chanakya
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